Yo soy dueña de mi locura, soy dueña de mis pensamientos y sentimientos, de mis actos  y mis palabras. Pero tú, tú eres el dueño de mi corazón, eres el que puede hacer que mis palabras, actos, pensamientos... Sean estúpidos, sean incoherentes e irracionales. ¿Como lo consigues? Mucha gente intentó hacer que mis pensamientos cambiaran, nunca lo consiguieron. Gente quería que cambiase mis actos, tampoco lo consiguieron, pero tú, TÚ ha ces que yo  no tenga   voluntad.

Tú... A tí te odio por quererte, a tí te odio por perder mi voluntad con tan solo una mirada.